Sísifo, fue condenado al Tártaro, la zona más profunda del Infierno que está rodeada por una muralla y franqueada por una puerta inexpugnable hasta para los dioses (Lugar de castigo para los malvados, especialmente para los que han ofendido o
agraviado a los dioses), por seducir a Tiro para matar a su hermano
Salmoneo. Como castigo le condenaron eternamente a subir una roca a lo alto de una colina, de donde la roca vuelve a bajar por el otro lado, y Sísifo ha que volver a empezar.
Homero menciona el castigo eterno de Sísifo en el canto XI de la Odisea (Descensus Ad Inferos):
"Y vi a Sísifo, que soportaba pesados dolores, llevando una enorme piedra entre sus brazos. Hacía fuerza apoyándose con manos y pies y empujaba la piedra hacia arriba, hacia la cumbre, pero cuando iba a trasponer la cresta, una poderosa fuerza le hacía volver una y otra vez y rodaba hacia la llanura la desvergonzada piedra. Pero él la empujaba de nuevo con los músculos en tensión y el sudor se deslizaba por sus miembros y el polvo caía de su cabeza." (Fuente: Artículo del blog "P3lUZa" (sak3lc.blogspot.com) para ver el artículo click aquí)
Otra versión de la mención de Homero del castigo de Sísifo es ésta:
"Advertí luego a Sísifo presa de enorme torturas. Iba a fuerza de brazos moviendo una roca monstruosa y, apoyándose en manos y pies, empujaba su carga hasta el pico de un monte; mas luego, llegado ya a un punto de dejarla en la cumbre, la echaba hacia atrás su gran peso; dando vueltas la impúdica piedra, llegaba hasta el llano y él volvía a empujarla con todas sus fuerzas."
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